LA MALA PATA DE......

Este mediodía entro como un huracán en la clínica del Rosario dispuesta a hacerme una prueba de chequeo que tenía pendiente. Al doblar un recodo, alguien me llama. Una voz familiar, cálida pronuncia mi nombre. Me giro, y ¿qué veo?, Mati con la pata CHULA, es decir, Mati con la pierna "no mala" vendada, escayolada, con muleta y su tía como acompañante que a su vez lucía un dedo vendado malo en su lustroso pie bronceado marino. Mati pudo contarme su historia que he de decir que es una "delicadeza". El sábado pasado quedo con Carmen (nuestra compi) para ver la peli francesa llamada LA DELICADEZA (Comedia romántica que muestra cómo Nathalie (Audrey Tautou) pierde en un accidente al hombre del que está enamorada. Tras cierto tiempo, el amor llama de nuevo a su puerta de la mano de Markus , compañero de trabajo mayor que ella con poco éxito con las mujeres.).

He aquí la historia : Ella que salia, (Mati) de cada de su amigo Hippi (Carlos?), tropieza, resbala?, y se le clava el escalón en el empeine del pie (vio las estrellas y como consecuencia se marea). Con este panorama,  tiene la "delicadeza" de llamar a Carmen: mira que no voy, que mira que me ha pasado esto. Y Carmen, que si entro al cine que si que no, que si necesitas algo a tu disposicion Mati. Y Mati recuerda, recuerda muy bien que su coche esta aparcado en la Latina. Después tenemos Urgencias traumatológicas, que te vendamos, que no apoyes que esta tan inflamado que parece un bizcocho, que no vemos nada que vuelvas hija la semana que viene…. a consulta.

Y Mati, ¿que hace?, escoltada, ayudada, sin familia (todos veranean), se va a casa sola y SOCORRIDA por los amables vecinos, solidarios, y voluntarios todos ellos, instala un zulo de diseño en su dormitorio. Lo primero agua, la eparina, el ibuporfeno, la tele, ordenador y teléfono. Al fondo de la habitación, el departamento de lavandería: ropa sucia en un lado, que no estropee la vista. A su lado posa una muleta.

Carmen con delicadeza llama a Mati que que tal estas . Se ofrece a llevar a Mati al medico que da la baja…y se la da y su jefe de Bankia descubre que sin Mati no puede entrar en la sucursal: ¿se quedaran sin servicio los madrileños que por allí rondan? Mati que como un sereno atesoraba llaves, se niega a darlas, no sin mis llaves, exclama!. Finalmente, su jefe abre la ofi y todos tan panchos. Estos días sabemos o se por lo que ella me cuenta en la clínica,  que ha sobrevivido, que lanza llaves de su casa a todo aquel que quiera pasar a peinarla, vestirla, alimentarla, acunarla y darla conversacion, creo que toda su urbanizacion sabe lo de su pierna buena que ahora es la mala. En  espera de poder entrar en consulta, me confiesa que espera que no sea nada, y yo le deseo que así sea. Allí la he dejado, esperando juntos con otros pacientes a que la reconozcan, la pierna claro, y  estoy deseando saber como están ella y su pierna.